Locales 12/08/2023
12 de agosto
Parece irreal pero hay que insistir en aquello de que estamos hablando del presente y no del pasado. Son muy miserables el concepto y las afirmaciones de quienes pretenden observar lo acontecido durante la última dictadura cívico militar con una visión mercantilista o numérica. En parte, solo en parte, es comprensible por la falta de contemporaneidad con los hechos. Otros hablan sin saber, algo también habitual en estos días y, lo peor, sin fundamentar ni uno de sus dichos, cobardes e incapaces de sostener un debate público con alguien que conozca de qué se trata el dolor.
Ayer mismo dieron cuenta de su odio seguidores de Milei y otros.
Sostienen entonces, para personalizar, que estoy removiendo el pasado. Y debo informarle al ignorante inconsciente y al ideólogo consciente que en las próximas semanas y meses (tiempo futuro) sigue la sustanciación de juicios por la desaparición de decenas de personas. Hace pocos días las abuelas recuperaron a otro nieto de desaparecidos (el 133) apropiado durante la dictadura. Creo evidente la prueba como para finalizar con ese debate estéril e intencionado, claro.
Mi hermano Luis Daniel García, nuestro hermano, era un ser humano. No eran 9 mil seres humanos ni 30 mil. Era uno solo y fue secuestrado en su departamento de la calle Río de Janeiro 840, en Caballito, a la 01:40 de la madrugada de aquel 12 de agosto de 1976. Se lo llevó un grupo de encapuchados de su departamento en el que convivía con su esposa Laura.
¿Alguien escuchó hablar en este país de una guerra en Caballito? ¿Una guerra sucia?
Otra mentira insostenible.
Luis fue conducido al campo de concentración "El Campito" de Campo de Mayo. Luego dopado y subido a un avión en el mismo lugar, para ser arrojado al mar.
¿Qué guerra sería esta de asesinos nocturnos e impunes en vuelos de la muerte?
Sobre una guerra pregunten a los sobrevivientes de Malvinas que algo deben saber de ella.
A los desaparecidos no se les puede preguntar absolutamente nada ni conocer su identidad como sí pudiera hacerse en el cementerio de Darwin y, ojalá así se haga ya que hubo avances en ese sentido.
A Mauricio Macri, ex presidente de la Argentina lo consultaron sobre la cantidad de desaparecidos en nuestro país y respondió que 'no tengo ni idea'. Es real.
No tiene idea del número de desaparecidos. Puede ser.
Pero lo peor es que, al parecer, ni idea tiene de que al hablar de 'guerra sucia' repitió el justificativo esgrimido por los peores asesinos que habitaron este país conduciendo un gobierno dictatorial al que denominaron Proceso de reorganización nacional practicando el terrorismo desde el Estado.
Y eso es lo que se juzgó en Democracia: el terrorismo de Estado. Parece mentira pero hay que seguir hablándole del tema a aquellos que mezclan todo y confunden de la peor manera con la 'teoría de los dos demonios'. El gobierno de Raúl Alfonsín, un radical que no era del PRO, juzgó a las Juntas militares.
Montoneros, FAP, FAP, ERP y otros grupúsculos terroristas, con muchas asesinos en sus filas, nunca condujeron el Estado. Que paguen por lo que hicieron en la cárcel, siendo juzgados por sus crímenes. De allí a igualar, de allí a mezclar todo, hay un largo trecho.
Y de allí a pensar que es todo igual o que todo da lo mismo, una gran distancia.
La Justicia sigue actuando cada vez con mayor desidia.
No sabemos ni sabremos dónde está el cuerpo de Luis aunque sabemos que anda por acá, como siempre.
Creo representar la sustancia de nuestro pensamiento familiar. Nuestro inmenso dolor y la tristeza que se agiganta tras cuarenta y siete años de ausencia presente.
Y claro, están aquellos con un odio que nunca termina y un cerebro que nunca empieza. ¿Qué decirles?
Que hay mucho para agradecer a muchos amigos o desconocidos, compañeros y familiares, por su solidaridad pero, sobre todo, por su comprensión y su inmenso respeto.
AVG y familia
Copyright © 2015 | La Síntesis - El primer diario digital de Saladillo