La noticia fue confirmada por Peter Brune, secretario general de Cáritas Suecia y uno de los responsables del proyecto, quien explicó que el vehículo -originalmente usado por el Papa en su visita a Belén- fue reacondicionado para cumplir una nueva misión: ofrecer atención médica a menores heridos o desnutridos que hoy no tienen acceso a servicios de salud.