A través del juego el niño:

Se convierte en hábil explorador acerca de su mundo.

Comienza a expresarse.

Desarrolla su conocimiento.

Crece con curiosidad y confianza.

El juego tiene mucha importancia en el desarrollo del niño.

La familia y la escuela no deben permanecer indiferentes frente a este tema.

El juego es el mundo propio del niño. Es su mayor interés y forma parte de su vida. Constituye su verdadera realidad.

El juego del niño ha sido estudiado desde el aspecto físico, psíquico, estético y espiritual.

A través del juego el niño se expresa espontáneamente. Desde los primeros momentos de su vida, el niño juega con sus miembros, sus sonidos y objetos que tiene a su alrededor. El juego no acaba en el niño sino que perdura como la vida del hombre.

Hay varias teorías formadas sobre el juego de los niños y los juegos en general:

1. Teoría del recreo: La finalidad del juego es entretener y no satisfacer necesidades naturales.

2. Teoría del sobrante de energía: El niño descarga en el juego energía que le sobra y que ha acumulado en su organismo.

3. Teoría del atavismo: El juego es el conocimiento de las actividades de las generaciones pasadas que persisten en el niño y que se explica por la llamada "ley  genética", según la cual el desarrollo del niño es el resumen de la evolución de la raza.

4. Teoría catártica: Los impulsos preexistentes que no son buenos obtienen en el juego una salida inocente, sirviendo aquel de apoyo de las tendencias antisociales.

5. Teoría del ejercicio preparatorio: Es un ejercicio preparatorio para la vida que sirve como autoafirmación natural del niño.

6. Teoría del ejercicio complementario: El juego sirve para conservar los hábitos adquiridos.

7. Teoría de la ficción: El juego es libre ante fines ficticios, cuando las circunstancias reales no son de naturaleza que permiten satisfacer tendencias profundas.

Estas son las principales teorías que se han sostenido sobre el juego aunque se han hecho observaciones acerca de ellas. De esas objeciones, surgen que algunas de estas teorías son más acertadas que otras.

El juego desarrolla actividades y órganos  que han de ser útiles en la vida.

En el juego intervienen casi todas las actividades psicofísicas y psíquicas del niño. El juego activa los músculos y órganos corporales. Afina y desarrolla la sensibilidad y los órganos sensoriales.

Fomenta la imaginación al representar las acciones que hay que realizar.

Cultiva la inteligencia, al tener que resolver situaciones y problemas nuevos. Intensifica los sentimientos, al producir placer, dolor, entusiasmo, interés. Desarrolla la voluntad por el esfuerzo que supone.

Con respecto a los juegos hay muchas clasificaciones.

La más importante es la que se refiere a los juegos individuales y colectivos, a juegos jugados por el niño o junto a otros niños. El niño pequeño juega solo y aún en los primeros grados escolares tiende al juego individual o sólo con unos pocos compañeros: el juego colectivo se desarrolla en la segunda infancia y la adolescencia.

Hay juegos sensoriales, juegos motores, juegos psíquicos, etc.

El valor educativo que tiene el juego es importantísimo.

FROEBEL, maestro y filósofo alemán, fue el primero que reconoció el valor educativo del juego y lo incorporó para siempre a la pedagogía. Se refirió a su influencia sobre la infancia cuando expresó: "EL JUEGO ES EL MÁS PURO Y ESPIRITUAL PRODUCTO DE ESTA FASE DEL CRECIMIENTO HUMANO.

ES A UN MISMO TIEMPO MODELO Y PRODUCCIÓN DE LA VIDA TOTAL, DE LA ÍNTIMA Y MISTERIOSA VIDA DE LA NATURALEZA EN EL HOMBRE Y EN TODAS LAS COSAS. POR ESO ENGENDRA ALEGRÍA, LIBERTAD, CONTENTO, PAZ Y ARMONÍA EN EL MUNDO. DEL JUEGO EMANAN LAS FUENTES DE TODO LO BUENO."

Los juegos preferidos en la educación serán aquellos que elijan los mismos niños.La escuela debe partir de ellos para los juegos más refinados y educativos.

La intervención docente debe hacerse en forma discreta sin que aparezca como una clase más que da a sus alumnos. Así el niño perderá el interés en el juego y no se perderá su valor educativo.

Profesora TERESA DE LOS ANGELES TURRIÓN