Indignación tras la decisión del Obispado de cortarle la obra social al padre Sergio Schwindt

Múltiples voces de repudio e indignación se alzaron en las redes sociales en las últimas horas, luego de que el propio sacerdote Sergio Schwindt, internado desde hace días por su afección, denunciara que monseñor Hugo Manuel Salaberry, Obispo de la Diócesis de Azul, le quitara la cobertura de su obra social.

Desde la cama del centro de salud donde se encuentra alojado, el ex vicario de la Parroquia Nuestra Señora de la Asunción, muy querido en la comunidad de Saladillo y la región, manifestó en un video: "Quería avisarle a toda la sociedad que Hugo Manuel me cortó la obra social".

"Duele saber que un sacerdote enfermo haya denunciado que el Obispo le quitó la cobertura de su obra social. No es pregonar la obra de Dios dejar sin amparo a un hermano que sufre", reflexionó el juez de Familia Daniel Morbiducci, una de las personas que se solidarizó con el padre Sergio.

"Cuando la institución se olvida de la compasión y se aferra sólo a la norma, deja de reflejar el Evangelio para volverse una estructura vacía. La fe no se mide en jerarquías, sino en gestos de misericordia", añadió.

"Nos abandonaron"

A través de un posteo en el que también difunde el testimonio de su hermano, María Victoria Schwindt señaló que "Sergio está lúcido, consciente y en total uso de sus facultades mentales".

"Como él mismo lo explica en el video, el obispo Salaberry nos abandonó. Intenta tratarme de loca y que manipulo a mi hermano. Pero saben que no es así", aseguró.

"Le pido al Obispo que deje la farsa de lado y se encargue de un hermano, un sacerdote. Ablande su corazón y deje la avaricia de lado. Y, por favor, deje de mandarme emisarios. Deje de usar al padre Rafael Grassetti y al padre Estanislao Fariña. No les tengo miedo", concluyó.

FUENTE: ahorasaladillo-diariodigital.com.ar