Internacionales 21/10/2025
Crecen la polémica y las preguntas
El robo de joyas históricas en el museo del Louvre aún no encuentra explicaciones. Y entre la decepción de miles de turistas que se acercaron al reconocido sitio parisino, el testimonio de una empleada reveló uno de los momentos más impactantes del robo de las joyas históricas de la emperatriz Eugenia.Marika -nombre ficticio, según aclaró a la agencia ANSA- cumplía su turno en el área de seguridad cuando, junto a sus compañeros, encontró la corona tirada en el suelo, a pocos metros del museo. "Salimos corriendo después del robo y vimos en el suelo la corona de Eugenia. No podía creerlo", relató aún en estado de shock.
El objeto, de valor "inestimable", presentaba daños visibles: varias piedras preciosas se habían desprendido tras el incidente. "Claro que está un poco dañada, pero al menos la hemos salvado", sostuvo la trabajadora, quien aseguró que el equipo de seguridad intervino "tan pronto como entendió que algo extraño estaba sucediendo".
El museo permaneció cerrado al público, mientras la policía científica trabajaba en el área. "Hoy no se puede entrar", repitió Marika desde una de las puertas internas. En el exterior, decenas de visitantes esperaban bajo la lluvia frente al cartel que informaba el cierre "por motivos excepcionales".
Francia revisa la seguridad de sus museos
Tras el impacto inicial del robo, el gobierno francés convocó una reunión de emergencia entre el ministro del Interior, Laurent Núñez, y la ministra de Cultura, Rachida Dati, junto con responsables de las fuerzas del orden, de acuerdo con EFE. El encuentro tuvo como principal resultado una directiva nacional para evaluar la seguridad de los museos y sitios culturales en todo el país.
Dati reconoció públicamente que "la responsabilidad son los cuarenta años de abandono sobre la cuestión de la seguridad", y apuntó contra gestiones anteriores del Louvre. Según un informe filtrado del Tribunal de Cuentas, el museo destina una proporción mínima de su presupuesto anual -323 millones de euros- a tareas de seguridad, muy por debajo de las necesidades reales.
El documento señala que en los últimos cinco años solo se instalaron 138 cámaras, cubriendo apenas un tercio de las salas del museo. Los expertos también remarcan la falta de voluntad institucional para actualizar los protocolos y sistemas de vigilancia.
La ministra de Cultura destacó que, pese a las demoras, el gobierno de Emmanuel Macron ya anunció un plan de renovación integral del museo, con una inversión de 800 millones de euros, de los cuales 160 millones serán destinados exclusivamente a reforzar la seguridad.
"El Louvre, en su estructura actual, no fue concebido para la cantidad de visitantes que recibe, ni está preparado para las nuevas formas de delincuencia", afirmó Dati.
Mientras tanto, las puertas del museo más famoso del mundo siguen cerradas y la investigación policial continúa. En el centro del escándalo, la corona dañada de Eugenia -rescatada del suelo gracias a la rápida acción de una trabajadora- se ha convertido en el símbolo de una crisis que Francia ya no puede ignorar.
El Louvre en números y los problemas de seguridad
En 2024, el Louvre recibió nueve millones de visitantes, de los cuales el 80% eran extranjeros, lo que lo convierte en el museo más concurrido del planeta. Junto con la Torre Eiffel, constituye una de las paradas obligadas de la capital francesa.
El robo de las joyas históricas, ocurrido el domingo, dejó al descubierto no solo una brecha en los sistemas de seguridad, sino también la dificultad de resguardar adecuadamente un patrimonio artístico y cultural que excede cualquier medida convencional.
Copyright © 2015 | La Síntesis - El primer diario digital de Saladillo