El presunto dueño se presentó ante la justicia para reclamar el desalojo.

Luego de las usurpaciones de terrenos en el conurbano bonaerense que aún no tienen solución y mantienen en vilo a los gobiernos municipales y la gobernación, la preocupación por el crecimiento de las tomas en el interior de la provincia comenzó a expandirse rápidamente.

Como era de esperarse, el delicado panorama económico y social que se agudizó con el COVID-19 desencadenó en situaciones más conflictivas. En Tandil, según informó el diario El Eco, actores judiciales y políticos corren contra reloj para buscarle una solución pacífica a una toma masiva de lotes.

En pleno corazón del barrio Palermo de la ciudad vecina, veinte familias se establecieron en las manzanas delimitadas por las calles Segundo Sombra, Casacuberta, Muñiz y Caseros. En enero pasado, el dueño de esos terrenos que supuestamente los adquirió por usucapión, se presentó ante la Justicia para iniciar el desalojo ante la falta de respuesta por parte del municipio.

Días atrás, el Juzgado de Garantías avaló la petición del fiscal interviniente y firmó la orden necesaria para terminar con la usurpación. Ahora, las familias que ocupan aproximadamente 13 lotes tienen un plazo de 30 días para retirarse del lugar.

Las familias, que aguardan con desesperación el paso del plazo fijado por la justicia aseguran que no tienen dónde ir, que tomaron los terrenos ante la acuciante necesidad de tener una vivienda y que el predio siempre estuvo desocupado y nadie se hacía cargo de su mantenimiento, por lo cual pensaban que no tenía dueño.

Fuente Infoeme